Colonia del Sacramento 5 estrellas

Colonia del Sacramento 5 estrellas

Hace unos días tuve el honor de (re)descubrir un rinconcito de nuestro país: Colonia del Sacramento. Fui invitada por Radisson Hotel, junto a otros medios de prensa rioplatese, a disfrutar de sus instalaciones y visitar varios puntos maravillosos del departamento.

 

Solárium y piscina infinita del Hotel Radisson Colonia

 

Son 180 los kilómetros que separan a Montevideo de Colonia, aproximadamente 2 horas y media de viaje, y a 1 hora de Buenos Aires yendo por agua. El hotel, categoría 5 estrellas, está ubicado a 100 metros del centro histórico y es muy práctico para poder pasear sin necesidad de un auto. Cuenta con piscina exterior y solárium, piscina interior con vista al río, hidromasajes, sauna, y un restaurante que te hace sentir que estás en un barco.

 

Mi camisa, jean y zapatillas de Arkitect

 

Me pareció que el hotel es apto para muchos tipos de viajeros: para los que viajan en pareja plan relax, para familias con niños chicos o bebés, y para grupos. Durante época de vacaciones el hotel pone a disposición baby-sitters para entretener a los chicos en el rincón infantil, y cuenta con carritos eléctricos para que los huéspedes conozcan Colonia del Sacramento con total libertad (la empresa Thrifty tiene cachilas antiguas eléctricas!).

La habitación que me tocó estaba impresionante! Super silenciosa y amplia, tenía una terraza con vista a la piscina infinita sobre el Río de la Plata, una cama anchísima que invitaba a dormir en diagonal, ducha con excelente presión, toallas bien gorditas, y un secador de pelo profesional que humillaba al que había llevado…

 

 

Durante la primera mañana me alegró comprobar que en el hotel se toman el desayuno tan seriamente como yo. Un buen desayuno es, en mi opinión, una pata importante de la experiencia de ser huésped, y no hay nada mejor que encontrarse con una buena selección de frutas, con panadería elaborada ahí mismo, buen café, fiambres, y opciones calientes.

 

 

 

Pude hablar con Fernanda Rodríguez, chef pastelera del hotel, acerca de algo que me re interesa: la organización del desayuno. Me contó que el trabajo comienza el día anterior preparando las fuentes de frutas, que se embalan y dejan en frío. La mañana misma las tareas empiezan bien temprano, a las 4.30 am ya que el desayuno se sirve a partir las 7 y todo tiene que estar listo para entonces. Se hornean los panes, bizcochos y budines, pero también se elaboran las papas salteadas con panceta, los huevos revueltos, y waffles. Como para no probar todo… 😅😋

 

Fernanda Rodríguez, chef pastelera del Hotel Radisson

 

Los mejores consejos turísticos se obtienen generalmente de los locales, por eso pregunté en el hotel, en la calle y en los comercios acerca de esos lugarcitos que no hay que dejar de ver. Acá van los que más se repitieron:

  • Casco histórico, obvio (hay visitas guiadas todo el año)
  • Pasear por su rambla (la costanera)
  • Durante la temporada de verano, visitar los balnearios de Santa Ana, Artilleros, etc..

En cuanto a la oferta gastronómica me recomendaron visitar el restaurante del hotel Charco, el del hotel Real Colonia, y el té que se sirve en el Radisson. Durante mi estadía pude visitar el restaurante “Recrear la Historia”, que se merece una nota que vendrá más adelante!

 

Leonardo Almada, chef ejecutivo del hotel, nos presenta un cheesecake con frutos rojos

 

Gracias a los consejos que me dieron pude armar un recorrido escueto pero contundente. Lo mejor es visitar Colonia de Sacramento entrando por el mismísimo portal, de donde salen los tours guiados.

 

Puerta de entrada a la antigua ciudad amurallada

 

Bajé caminando por la Calle de los Suspiros, una cuadra llena de mística. En el sitio WelcomeUruguay encontré un párrafo que la describe muy bien.

Esta pequeña calle es una peatonal angosta, desnivelada, sin veredas y pavimentada con piedras de cuña. Antiguamente, esta pintoresca calle era llamada Ansina. Las leyendas se tejen sobre su nombre actual: ¿por qué Calle de los Suspiros? Hay varias historias. Una de ellas sostiene que los condenados a muerte eran llevados hasta la calle de los “suspiros” para ahogarlos cuando subiera la marea. Otra historia postula que esta calle solía albergar numerosos prostíbulos, refugios de marineros cansados y deseosos de diversión, y que al transitarla los soldados piropeaban a las prostitutas y suspiraban una y otra vez por ellas. La última historia, y tal vez la más romántica, cuenta que una noche maravillosa de luna, una joven enamorada estaba esperando a su amado. De repente, un enmascarado le clavó una daga en el medio del pecho. Sólo se escuchó un desalentado suspiro de adiós…

 

Calle de los suspiros

 

 

Este lugar te atrapa por su historia, y si sus edificios hablaran podrían contar de cuando Manuel Lobo la fundó en 1860, o de cómo pasó de dominio portugués a español (y viceversa) varias veces. Sin dudas, la importancia cultural del casco histórico se hizo patente en 1995, cuando fue declarado Patrimonio Mundial por Unesco, y el faro es el mejor lugar para apreciar su excelente vista bien desde lo alto.

 

Faro de Colonia

 

La tranquilidad que se respira y la seguridad de sus calles son cosas que van a tener que ir a sentir ustedes mismos. Hace 9 años no volvía a Colonia en plan turista y me impresionó la cantidad de bares, restaurantes y posadas que hay. Pude caminar tranquila por una hora y le di la vuelta al casco histórico sintiendo hablar portugués, inglés y porteño. Sin dudas Colonia del Sacramento es una joya que no pueden dejar de visitar, testigo de nuestra historia como país y muestra elocuente de su importa geográfica.

Algo importante de destacar es la limpieza de las calles, como también la prolijidad de las fachadas sin perder su esencia.

 

 

Quiero agradecer especialmente a Radisson Hotel Colonia del Sacramento por haberme hecho la invitación, y por haber organizado una serie de paseos impresionantes junto a la Intendencia de Colonia. Se esmeraron por mostrarnos algunos de los lugares más lindos que esta zona tiene, y se vienen las notas contando todo!

Próximamente… Visita a la bodega Cerros de San Juan, y una cena gourmet sobre el vagón de un tren.