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Se acuerdan de los brownies de mis sueños? Bueno, quise intentar hacerlos de chocolate blanco para #SaboresMagma y salieron buenísimos! La textura es bien cremosa, un poco chewy, y su superficie sequita y crocante. La recomendación queda hecha! Sigan leyendo que más abajo está la receta.
La receta es muy simple! El único secreto para tener éxito está en el batido de los huevos. Bátanlos bien e incorporen el azúcar lentamente, dándole tiempo a los cristales de disolverse y mezclarse mejor con la preparación. Otro secretito para un sabor final increíble está en agregar los frutos secos tostados. En estado crudo no logran el mismo sabor, pero si los ponemos bajo un proceso de calor (en sartén caliente seco, grill o unos 15 minutos a 180ºC) desarrollarán un gusto más rico y serán más crocantes.
Por acá somos fanáticos (léase FANÁTICOS) de los brownies, por eso tenemos muuuchas recetas y versiones.
Brownies con cerveza negra, ganache y nueces. La cerveza negra es un ingrediente que, así como el café, levanta el sabor del chocolate. Muy recomendable!
Lo último que queda agregar es cómo servirlos… Pueden comerlos así como vienen, pero también pueden filetearles chocolate blanco por arriba, o servirlos tibios como postre con una bocha de helado. Me los estoy imaginando con un poco de dulce de leche marmolado en la masa… OMG
Derretir la manteca y el chocolate a baño maría. Recordar que el agua hirviendo no toque el bowl donde tenemos los ingredientes.
Batir con batidor eléctrico los huevos junto con la vainilla y la sal. Una vez que están espumosos, incorporar de a poco el azúcar. Batir bastante hasta que obtengamos una mousse untuosa y clara.
Incorporar el chocolate a la mousse e ir mezclando con movimientos suaves y envolventes.
Agregar la harina, luego las nueces, y verter en un molde enmantecado y enharinado (o con papel manteca).
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Anteriormente publiqué la receta de una Galette versión salada, con calabacín, cebollas caramelizadas y queso (altamente recomendable!). Sin embargo, tenía pendiente mostrarles lo versátiles que son en versión dulce. Esta tarta de peras, que hicimos en una nueva edición de Sabores Magma, demuestra lo linda …
Hace poco alguien me preguntó si tenía en el blog una receta para hacer alfajores de maicena. Me fijé en el índice de recetas y me di cuenta que no! Obviamente no puede ser…
Los alfajores de maicena son una de esas cosas que hago desde chica, y siempre la misma versión, la del Crandon. Me acuerdo que siempre recurría a ese libro para inspirarme y buscar qué cocinar. Recorría el índice con el dedo a ver qué me llamaba la atención. Sin embargo, la mayor parte de las veces terminé haciendo estos alfajores, y su masa cruda es ta rica que costaba no comerla antes de tiempo. Quien diría que años después terminaría estudiando gastronomía en ese instituto!
Los alfajores de maicena perfectos
Hay mil versiones de alfajores de maicena, aunque no todos son perfectos. En mi opinión, tiene que haber un balance entre la masa y el relleno. Basta de esos alfajores pura masa y una untadita de dulce de leche. Cada tapita de masa no puede tener más de 1 cm de espesor, si no menos, y debe tener un relleno que destaque.
La masa de esta receta crece bastante en el horno, por lo cual recomiendo estirarla a 1/2 cm de espesor antes de cortar.
Para rellenar mis alfajores, generalmente pongo dulce de leche repostero en una manga. Pongo un buen copete en la mitad de las tapitas, cierro con las otras, y presiono ligeramente para que salga dulce. Eso que se salió es lo que paso por el coco rallado. No me complico la existencia untando los lados del alfajor…
El dulce de leche perfecto
Por último, usen un dulce de leche rico. Puede sonar a una obviedad, pero si el dulce de leche es tan cremoso que se escurre, o feo, va a estropear todo nuestro trabajo. Recomiendo usar un dulce de leche firme que puede o no ser repostero. La diferencia que tienen estos últimos, es que se elaboran con almidón de maíz. De esa forma se logra un dulce de leche bien espeso, ideal para usar en alfajores, pinitos, y otras preparaciones.
Si les gustan los alfajores (a quién no? 😅), miren esta y esta otra receta. No van a saber con cual quedarse! 🙈
Mezclar la manteca, el azúcar impalpable y la ralladura en un bowl amplio con cuchara de madera. Si no tenés azúcar impalpable podés usar común, pero luego del horneado se van a ver puntitos más oscuras, producto de la caramelización de los granos de azúcar.
Incorporar los huevos de a uno por vez haciendo movimientos enérgicos. Es recomendable que los huevos estén a temperatura ambiente para que te sea más fácil homogeneizar la preparación.
Aparte, tamizar en un bowl la harina, almidón de maíz y el polvo de hornear. Incorporar a la mezcla de manteca hasta formar una masa. No trabajarla demasiado.
Precalentar el horno a 180ºC. Tené a mano una asadera amplia, y si confiás en ella no es necesario que la enmanteques.
Pasar la masa a una mesada apenas enharinada, estirarla hasta que tenga medio cm de espesor y cortar las tapitas de los alfajores. Juntar los recortes y cortar más tapitas hasta que la masa se acabe.
Hornear una asadera por vez alrededor de 9 minutos. Deben cocinarse pero mantenerse lo más claritas posible.
Dejar enfriar las tapitas sobre una rejilla y luego rellenar con dulce de leche repostero (o uno que sea bastante firme). Presionar un poquito para que el dulce sobresalga y pasar los lados por coco rallado.
Notes
Me encanta guardar los alfajores al menos un día en la heladera y comerlos después. Requiere mucha fuerza de voluntad, pero la textura de la masa resulta increíble.
Por algo será que cuando algo nos hace sentir realmente bien, que nos reconforta el espíritu, se usa la metáfora «como chocolate caliente para el alma». Hay una bebida para cada momento, y sin dudas el chocolate caliente es ideal para las tardes invernales que …
Hace tiempo vengo haciendo esta tarta, façon galette, y no me canso! Se la he dado a probar a mi familia, amigos, y todos terminan preguntando por la receta. Es por eso que me dispongo a compartirla en el blog, y cada vez que alguien …
La receta que comparto hoy es una que atesoro como pocas. La primera vez que probé estos brownies fue durante un paseo en bicicleta que me hizo sudar la gota gorda! No sé si mi cuerpo estaba añorando calorías (y de las buenas) o qué, pero parar a descansar y comer lo que nuestra amiga Nina había traído fue glorioso. De ahí que mantengo un excelente recuerdo de esta versión de brownies, y cada tanto los hago en casa.
Son los brownies más húmedos y chocolatosos que jamás hayan probado (o mejor dicho, vayan a probar). Su superficie es crocante, sequita. A mi entender son perfectos.
El «paseo» que hicimos en bicicleta fue por unos caminos que toma la Tour de France cuando pasa por Grenoble. Me quería matar. La subida fue horrorosamente difícil de hacer, empinadísima, y en la bajada estoy segura que levanté más de 100 km/h! Sin exagerar.
Igual en la parte media del recorrido tuvimos tiempo de turistear un poco y sacar fotos…
Y no voy a mentir, las subidas empinadas las hacíamos caminando al lado de la bici, jajaja 😅
Algunos venían más preparados que otros… Por suerte no aparezco, fotógrafa asignada como siempre.
Bue, ahora me entienden? Cansancio extremo merecía recompensa, y la receta de estos brownies es una que mi amiga Nina aprendió de un Chef francés que trabajaba en un viñedo que ella visitó.
Harina, 1 Taza (120 gr) (para versión sin gluten ver nota al final)
Nueces tostadas, 150 gr
Instructions
Precalentar el horno a 180ºC.
Derretir la manteca y el chocolate a baño maría. Recordar que el agua hirvendo no toque el bowl donde tenemos los ingredientes.
Batir con batidor eléctrico los huevos junto con la vainilla y la sal. Una vez que están espumosos, incorporar de a poco el azúcar. Batir bastante hasta que obtengamos una mousse untuosa y clara.
Incorporar el chocolate a la mousse e ir mezclando con movimientos suaves y envolventes.
Agregar la harina, luego las nueces, y verter en un molde de 20 x 20 cm. A mi me gusta empapelarlo, enmantecarlo y enharinarlo para que salgan perfectos. Mirá acá el video tutorial. Hornear entre 25 y 30 minutos, no más!
Notes
Una seguidora me contó que sustituyó la harina de trigo por fécula de maíz y qudaron buenísimos! A tener en cuenta!
Cuando en #SaboresMagma me propusieron cocinar con Lucía, sabía que la cosa venía bien encaminada. En su Instagram, ella se describe como «foodie by heart«, y son varios los posteos que le dedica a la comida. La foto que le sacó a su Shakshuka despertó …